Por Melina Martire para Eclécticamente Arte
LA PATRIA QUE NO LOGRA REPRESENTARSE
El imaginario de una Argentina naciente que no puede verse a sí misma sin sus contradicciones y luchas internas.
En plena Campaña del Desierto, una guarnición del ejército argentino se dispone a preparar los festejos del veinticinco de Mayo, que contará con la presencia del presidente Roca y su comitiva. Contratan para ello a una actriz extranjera (personaje inspirado en Sarah Bernhardt y en su gira por el sur del país) que les ofrece un espectáculo único junto con su compañía de actores. Pero las cosas se complicarán cuando no logren entenderse. Las cosmovisiones de ambos grupos entran en conflicto en esta tragicomedia criolla que nos interpela fuertemente.
La pronta representación teatral se ve frustrada, la compañía se niega a hacerla si no liberan a un soldado condenado a muerte por desertor. Por eso, el comandante decide reunirse con la primera actriz para presionarla. En ese encuentro se irán conociendo y cada uno expondrá sus puntos de vista. El jefe militar está convencido de que hace lo correcto, al eliminar al supuesto traidor (el hombre se escapó de las filas cuando creyó ver, como en una visión, a su mujer y a su hijo pequeño esperándolos, tal como los dejó hace veinte años), mientras que la actriz clama por su inocencia y justifica su accionar. En el desierto todos los hombres enloquecen poco a poco, luchando contra los de su mismo origen.
Finalmente se ponen de acuerdo y llevan a cabo el plan de la intérprete: hacer de cuenta que lo fusilan, usando un arma de utilería, y llevárselo con ella en la gira. De eso modo quedan saldados el honor del comandante y del ejército, y la vida del soldado.
La intromisión del sargento no colabora con la situación. Un personaje sumamente cómico en el que se arraigan todas las contradicciones: ¿Cómo hará para simular que lo mata? ¿Quién vela por su propio honor? ¿Qué imagen dará ante sus súbditos?.
Sus dudas se suman a las del condenado. Este no logra comprender la diferencia entre la realidad y el simulacro. Falla una y otra vez ensayando su muerte, y se siente aturdido y ultrajado, la posibilidad de poner su vida por sobre la de la patria le parece absurda. Mientras la actriz se apoya en la supuesta superioridad del arte teatral, y principalmente de las obras de Shakespeare, para transformar a las personas, y culturizarlas.
En un espacio semicircular, con inspiración en el circo criollo, y dos músicos en escena, la puesta mantiene un ritmo atrapante. El recurso de la metateatralidad sostiene la pieza, que va mutando, gracias a las grandes interpretaciones de sus actores, de la farsa cómica a la tragedia de la civilización vs la barbarie.
La voluntad (teatro a distancia) nos habla de la imposibilidad de acercar posiciones, el ideal de nación que mira con anhelo a Europa, y la realidad tangible de un desierto mutilado en sus elementos más esenciales, la tierra y sus habitantes originarios.
Ficha técnico artística
Autoría: Eva Halac
Intérpretes: Catherine Biquard, Martin Caminos, Leandro Cóccaro, Mucio Manchini, Julián Martínez, Martín Rebechi
Músicos: César Nigro, Martín Rodriguez
Diseño de vestuario: Micaela Sleigh
Diseño de escenografía: Micaela Sleigh
Diseño de luces: Carolina Rabenstein
Realización de escenografia: Gustavo Di Sarro
Diseño gráfico: María Forni
Entrenamiento actoral: Fabian Caero
Asistencia de escenografía: Agustina Fernandez Poblet
Asistencia de vestuario: Josefina Minond
Asistencia general: Lailén Alvarez
Prensa: Silvina Pizarro
Producción ejecutiva: Marina Kryzczuk
Dirección musical: César Nigro
Dirección: Hernán Márquez
Sala: Santos 4040 (Santos Dumont 4040, CABA). Sabados 18hs. Entradas $200