Reseña realizada por Iván Pedernera para Eclécticamente Arte.

El juego comienza, no sabemos cómo termina ni que desafíos tendremos en el…

Para empezar debo utilizar una frase ya muy conocida “menos es más”, eso es TODO EL TIEMPO QUE SE PUEDA, una obra que lo tiene todo. Una puesta en escena muy bien lograda, con una escenografía completamente original y cuenta también con música en vivo, que la hace más atrapante. Se apagan las luces en la sala y de pronto los actores aparecen en escena, uno de los personajes nos cuenta que el juego está por empezar.

Con el transcurso de los minutos vamos conociendo las distintas situaciones que nos plantea dicha pieza, las historias de los personajes y como van pasando los días llegando a caer en la cotidianidad. Esto no pasa desapercibido para el espectador que no puede alejar su mirada de las escenas propiamente planteadas, cada detalle es importante. Con un final que te toma por sorpresa y nos lleva a la reflexión.

El trabajo físico de los actores es destacable al igual que la energía que manejan en escena. El cuerpo está todo el tiempo en acción y tiene más protagonismo que la palabra. Es un placer que obras así estén en cartel. Somos los responsables de darle sentido a nuestras vidas, dar lo mejor, frenarnos y ver un poco a nuestro alrededor, no sabemos cuándo llegaremos al final del juego, pero si tenemos en claro que este con o sin nosotros… continúa.

Una creación de Grupo VP dirigida por Mariana Barceló

Actúan: Diego Aramburu Lucero, Félix Coll, Mariana Estensoro, Paula Garavaglia Martin, Laura Mickelsen, María Eva Verde.

Diseño sonoro y música en vivo: Alejandro Vergara Becerra.

 

Se presenta los sábados, 19hs, en Espacio Sísmico (Lavalleja 960 – Villa Crespo).

Reservas por Alternativa Teatral. Entradas $250.