Nota Realizada por Silvina Macri.
Marta Casale, es docente investigadora y crítica de cine, teatro y televisión. Licenciada en Artes Combinadas y Profesora de Filosofía, tiene publicados numerosos artículos sobre su especialidad en libros y revistas de ámbito académico, tanto a nivel nacional como internacional. Forma parte desde el 2003 del Instituto de Historia del Arte argentino y latinoamericano (Facultad de Filosofía y Letras, UBA). edita desde hace más de diez años, la Revista Digital El Espectador Compulsivo dedicada a la crítica de producciones recientes, sitio recomendado por los Premios Teatro del Mundo entre los mejores del rubro en el 2018. Como escritora tiene varios reconocimientos y cuentos publicados por revistas literarias de diverso origen.
Estuvimos hablando con Ella…
E.A.: Cuál fue el disparador, que te ha llevado a escribir este bello libro UN CIELO OSCURECIDO y Otros Cuentos?
M.C.: Hubo un disparador general que inspiró el libro y otros muy concretos que dieron origen a cada cuento en particular. El primero y, quizás, el más potente, fue la pandemia y el encierro que trajo consigo. Ese aislamiento que, paradójicamente, nos llevó a abrirnos de otro modo, creo que más intenso, a nosotros mismos y a los demás. Y también a las cosas que nos rodeaban. Pienso que eso, de algún modo, nos sucedió a todos. Tuvimos una percepción más clara de la temporalidad, cierta urgencia y cierta inquietud. Eso me llevó no solo a escribir ficción, que siempre fue mi pasión, sino a echar una mirada más piadosa sobre mi propia producción. A recoger con mayor cuidado aquello que sembraba cuando escribía, que, en aquel momento, era todos los días. Hice muchísimos talleres de escritura y de lectura vía Zoom. Eran mi ventana al mundo, el único puente que, en los primeros tiempos, se mantenía intacto. De esos talleres salieron las diversas consignas que motivaron los distintos cuentos. De esas lecturas compartidas, de esos textos leídos en grupo fueron tomando forma.
E.A.: En cada cuento, en cada historia, logras adentrarnos en ellos, sutilmente. Cómo fue el proceso creativo, como lo atravesaste?
M.C.: Cuando tengo el disparador, que, en general, es una situación o una lectura que me motiva, empiezo a escribir de corrido, aunque no siempre salga algo potable en el primer intento. La coordinadora de un taller que hice en 2020 solía decir que la mejor idea no es la primera, ni la segunda, sino la tercera. Creo que tiene razón. Muchas veces desecho algo que empiezo a escribir porque después del primer o segundo párrafo me doy cuenta de que no va a prosperar, que no me convence; sin embargo, una vez que encuentro un principio que me entusiasme, puedo seguir desarrollando el cuento de un tirón. Lo voy corrigiendo a medida que lo escribo, pero el rumbo ya está tomado; son correcciones menores. Por supuesto, el trabajo de edición previo a la publicación es más detallado, pero nunca me modificó demasiado un cuento. Solo uno de los seleccionados para el libro en la etapa inicial no pasó la prueba. Todos los demás salieron airosos de todas las revisiones.
E.A.: A quienes aún no han leído tu libro, como se lo presentarías?
M.C.: Es un libro especial por muchas razones. En primer lugar, porque reúne diecisiete relatos muy cortos que no tienen ilación entre sí. Diecisiete historias diferentes que proponen mundos diversos y, sin embargo, comparten entre sí cierto sentimiento de desazón, algunas situaciones límite. La mayoría de los cuentos fueron escritos en pandemia y algo de ese humor, de la inquietud y la sinrazón propias de la época, se les ha colado, aún cuando solo un texto habla específicamente de lo que sucedió. Por otro lado, la brevedad permite que cada cuento no demande mucho tiempo de lectura (algo importante en estos días en los que no hay demasiado espacio para esa actividad), mientras que la intriga se renueva de historia en historia. Por lo demás, la mirada que el libro propone reivindica lo cotidiano, pero busca en ello lo extraordinario; ese instante en el que irrumpe algo que puede resultar aparentemente nimio y, sin embargo, puede cambiarlo todo. Refiere a emociones y disyuntivas que son fácilmente entendibles y con las que es viable identificarse y aun así sorprende. Al menos, eso espero…
UN CIELO OSCURECIDO
Una colección de diecisiete cuentos, sin ilación unos con otros, que comparten entre sí, sin embargo, ciertos estados de ánimo, algunas situaciones límite. Escritos en su mayoría durante pandemia, a pesar de tocar temas diversos con personajes muy distintos, algo del clima de desesperanza y sinrazón del momento se les ha colado, como una especie de trasfondo oscuro en los hechos más cotidianos. Pendientes del detalle, de lo aparentemente nimio, los relatos intentan captar ese instante en que la vida revela su carácter más existencial. Ese segundo que puede cambiarlo todo.
El libro se puede adquirir en Editorial Dunken, Ayacucho 357
Librería Las perlas rojas Rodríguez Peña 754
También en Mercado Libre
Para el exterior en Amazón
Prensa: María Ricchiardi