Por Emilio Zinerón para Eclécticamente Arte

Dos hermanos se encuentran con la excusa de un festejo de cumpleaños. Con la excusa de celebrar la fiesta para el hermano del medio, se destapa una caja de reproches y secretos que terminará con un vínculo irreconciliable.

Los seres humanos no tenemos el mismo modo de expresar nuestro dolor. Cuando se sufre, cuando el corazón se rompe o queda desahuciado, las personas se manifiestan de maneras tan diversas como insólitas; algunos lloran, otros reaccionan con violencia, otros hunden la cara en la almohada, algunos se lo guardan para sí mismos y otros lo gritan a los cuatro vientos. A veces las personas incluso pueden haberse criado juntas bajos las mismas circunstancias y comportarse de formas diametralmente opuestas.

Este es solo uno de los muchos aspectos que aborda la obra “El Inestimable Hermano”, escrita y dirigida por Heidi Steinhardt y que todos los viernes presenta su segunda temporada en el Camarín de las Musas. El planteo inicial es muy simple. Dos actores en escena. Inés y Bernardo (Natalia Salmoral y Ezequiel Rodríguez) esperan en la casa donde vivieron con sus padres, muertos hace un tiempo ya, para festejarle el cumpleaños a Fabio, el hermano del medio. No obstante, a medida que transcurren las horas, la llegada del homenajeado se dilata y el espectador comienza a sospechar que este jamás llegue.

La casa donde ahora solamente vive Bernardo desborda de globos, banderines y carteles de felicitaciones y buenos deseos, generando un clima de incomodidad y extrañeza. Y es que los dos personajes presentes, a pesar de su vínculo familiar, no podrían ser más distintos, en sus modos de vivir, de ser y expresar su dolor.

Resulta imposible no referirse a esta propuesta sin destacar el minucioso trabajo actoral. Ezequiel Rodríguez compone a un hermano menor cuya necesidad de transmitir su zozobra lo impulsa a llenar de palabras y anécdotas el vacío entre él y su hermana. Rodríguez en esta temporada reemplaza a Daniel Hendler que ocupó el rol hasta hace pocos meses. Se trata de un actor de demostrado talento que ha integrado varios elencos de Javier Daulte y que ha brillado en “La Edad de Oro” y más recientemente en “Proyecto Sade”. Su monólogo inicial, plagado de matices y comportamientos es prueba de su magnetismo y carisma en el escenario y consigue despertar la curiosidad por este hombre que no pareciera tener en claro si desea conmover, exasperar o enloquecer a Inés. Un hombre que solo se siente seguro rememorando el pasado, regresando a la casa de sus padres luego de haberla abandonado y que procura que el festejo sea perfecto. Natalia Salmoral encarna a esa hermana mayor aplastada por la congoja, en una interpretación tan antagónica que es imposible no observarla, sentirse intrigado y perturbado por sus miradas, las intenciones y destellos en sus ojos y esa aparente calma que encierra a una bestia.

La directora y autora no ha dejado a sus intérpretes a la intemperie, puede verse en detalle la red que supo tejer en cada fragmento de la historia, en cada propuesta que aparece pero por sobre todo en la convicción de los actores con el material. Por un lado, se trata de un bello texto plagado de imágenes; por momentos, enternecedor y a veces descabellado. Además de eso, Steinhardt construye un universo muy particular con pocos elementos en el escenario y muy hábilmente consigue que sus cómplices se luzcan cada uno con sus personajes.

“El Inestimable Hermano” nos invita a un carrusel emocional. Es una invitación a un festejo que nos obligará a preguntarnos de qué nos reímos en verdad y a cuestionarnos nuestro modo de lidiar con el dolor. Una tragicomedia con una fuerza y energía que no pueden dejar indiferente.

Actúan: Ezequiel Rodríguez (Bernardo) y Natalia Salmoral (Inés)

Diseño de vestuario: Amelia Barros

Realización de vestuario: Manuela González Cáceres

Diseño de iluminación: Christian Gadea

Fotografía: Gustavo Maggi

Prensa y difusión: Carolina Alfonso

Asistente de producción: Paula Russ

Colaboración artística: Carla Pessolano

Segundo asistente de dirección: Franco De Santis

Primera asistente de dirección: Florencia Orce

Dramaturgia y dirección: Heidi Steinhardt

 

Funciones: viernes 20 hs.

Duración: 90 minutos

 EL CAMARÍN DE LAS MUSAS

Mario Bravo 960. Reservas: 4862-0655

http://www.elcamarindelasmusas.com/

Entradas: $ 300 y $ 250 (estudiantes y jubilados con acreditación)

2×1 Club La Nación y menores de 30 años.