Reseña realizada por Mirta Mato.

Dora es un personaje que puede parecerse a una madre o una abuela de cualquier familia.  Una mujer, recientemente viuda, siempre dispuesta a dar cobijo en su casa a quien lo necesite.  Su cocina es el espacio en el que transcurre la obra.  Allí esta Dora, siempre atenta a las necesidades de todos: su hija, su nieta y hasta el hijo del encargado del edificio en el que vive.  En su afán de atenderlos, también está manifestando sus propias angustias y necesidades.

A medida que la acción avanza, estas situaciones cotidianas y simpáticas se comienzan a complicar a partir de cierta confusión que manifiesta la propia Dora y hace precipitar los acontecimientos de manera inesperada.

El director y autor de la obra es Martín Goldber, quien logra darle a la trama un ritmo que no decae en ningún momento.

La abuela Dora está interpretado por la actriz Cristina Maresca, quien le otorga a su personaje una simpatía y frescura que inmediatamente conquista a los espectadores.  Graciana Urbani encarna a la hija, a su vez también madre con un sinfín de conflictos y contradicciones, Rocío Gómez Wlosko es la nieta y Brian Ross el hijo del encargado.  Cada uno brilla en su rol, haciendo creíble cada acción de su personaje.

El humor es uno de los ingredientes principales de esta obra, pero poco a poco va dejando espacio a la ternura y la reflexión.

Actúan: Cristina Maresca, Graciana Urbani, Rocío Gomez Wlosko y Braian Ross

Diseño de iluminación: Carolina Rabenstein

Diseño de escenografía y vestuario: José Escobar

Realización de escenografía: Agustín Justo Yoshimoto

Música original: Lucas Sebastián Ramírez

Fotografia: Marina Paiz

Diseño gráfico e Ilustración: Margarita Cubino

Prensa: Caro Alfonso

Asistente de dirección: Inti Zúñiga

Producción ejecutiva: Jimena Morrone

Dramaturgia y dirección: Martín Goldber

Funciones: lunes 20.30 hs.

Duración: 70 minutos

ESPACIO CALLEJÓN – Humahuaca 3759

Entradas:  general $3500 y estudiantes y jubilados $3000-