Reseña realizada por Debora Longobardi

Estuvimos en el Dumont 4040 viendo “Viento blanco”. Un unipersonal escrito por Santiago Loza, interpretado magistralmente por Mariano Saborido y dirigido por Valeria Lois y Juanse Rausch.

La primera imagen que nos recibe es una pileta de lavadero, de cemento frío y llena de agua. Un rincón sencillo, que se convierte, luego, en un escenario cargado de significado. El sonido del viento, un viento blanco, que ruge sin descanso. Fuerte, constante con el que hace su aparición el protagonista de esta historia, que usa como interlocutor al público. Está solo. Se siente solo. Y es, tal vez, la soledad, lo que lo impulsa a hablarnos, a desnudarse ante nosotros, a entregarnos pedacitos de su historia, de sus recuerdos, de su vida. Despedidas, cambios, un reencuentro. Un pueblo olvidado. Tareas rutinarias. Un difícil vínculo, madre e hijo. ¿Se puede sanar ese vínculo? ¿A la madre se la quiere siempre? Desenlaces inesperados y una esperanza que renace como una luz al final del camino para nuestro protagonista. Un momento sobrenatural que es descomunal y que ayuda a la reconciliación.

Marito, es un personaje extraordinariamente compuesto con precisión milimétrica por Mariano Saborido. Cómo camina, cómo habla, cómo se mueve, cómo canta… todo en él es un detalle sobre detalle, una construcción minuciosa de este ser que nos muestra sus fortalezas, pero sobre todo sus debilidades.

Mención aparte para quienes están al frente de la dirección y la puesta en escena de este espectáculo: Valeria y Juanse. Ambos desarrollan de manera exquisita su visión artística de la obra, logrando que cada detalle, se luzca y que esta historia cale hondo en los espectadores.

Un texto poético de Santiago Loza, lleno de imágenes, que permite un amplio abanico emocional. Nos muestra situaciones detalladas, y nos hace imaginar, a cada personaje que Marito describe.

Hablar de Viento Blanco es hablar de una conjunción de elementos que, alcanzan la excelencia. Cada detalle, cada componente de la obra, está al servicio de un espectáculo que conmueve.

Con: Mariano Saborido
Dramaturgia: Santiago Loza
Diseño de escenografía: Rodrigo González Garillo
Diseño de vestuario: Pablo Ramírez
Diseño de luces: Matías Sendón
Diseño sonoro y música original: Teo López Puccio
Fotos: Sebastián Freire
Diseño: Martín Gorricho
Asistencia de dirección: Mercedes Aranda, Pablo Cusenza
Asistencia de producción: Florentina Messina
Producción: Carolina Castro
Producción general: Compañía Teatro Futuro, Mariano Saborido
Prensa: Cecilia Gamboa
Dirección: Valeria Lois, Juanse Rausch

FUNCIONES: Domingos 20.30 y lunes 20h
Dumont 4040 – Santos Dumont 4040 – CABA-