Por Emilio Zineron para Eclécticamente Arte
Entre el thriller, la comedia y el romance en 2001. Nada es lo que parece. Todos somos abrumantes y desesperados.
Hace ya dos años que se repite la misma situación en el hall del El Camarín de las Musas: largas filas y localidades agotadas para ver “Clara” de Sofía Wilhelmi, uno de los sucesos de la cartelera porteña del teatro alternativo.
Ambientada en 2001, la pieza narra la historia del esposo de Clara (Agustín León Pruzzo), que debido a la enfermedad que padece su mujer, recurre al único neurocirujano en el país que puede salvarle la vida. Al no contar con el dinero suficiente, el médico (interpretado hilarantemente por Javier Pedersoli) se niega lo que desencadenará en un intento de venganza plagado de situaciones irrisorias e impredecibles que mantendrán al espectador en el borde de su butaca sin parar de reír. El resto del elenco lo completan Ezequiel Tronconi, Claudio Mattos y Francisco Prim.
Resulta difícil adelantar mucho más de la historia sin revelar grandes sorpresas. Wilhelmi consigue crear un universo muy rico y verosímil para estos personajes y muestra su habilidad como dramaturga de construir un relato sostenido lleno de gags y momentos memorables que va agravándose a medida que avanza.
La escenografía, un enorme ropero, funciona como metáfora de la obra en sí misma y resulta un dispositivo ingenioso a modo de puerta giratoria para el ingreso y egreso de personajes.
El elenco íntegramente masculino demuestra gran soltura en el escenario, consiguiendo subirse a la cresta de la ola para contar con buen ritmo y humor esta historia. Probablemente sea Francisco Prim, quien en unas pocas escenas, interpreta a Ramiro con mayor sensibilidad y contradicción emocional sin caer en el estereotipo.
“Clara” es una gran obra que vale la pena ver, en donde nada es lo que parece, donde parece que se nos está contando algo pero estamos viendo otra cosa impensada; donde las contradicciones humanas están a la vista y a flor de piel, pero también donde el espectador podrá reírse sin culpa y sobre todo, sin prejuicio, y es quizá eso último lo que termina por engrandecer esta comedia.
Actúan: Javier Pedersoli, Agustín León Pruzzo, Ezequiel Tronconi, Francisco Prim y Claudio Mattos
Fotografía: Malena Martinez Riva
Diseño gráfico: Petre
Diseño de espacio: José Escobar
Vestuario: Marina Claypole
Diseño de luces: Diego Becker
Prensa: Carolina Alfonso
Asistente de dirección: Natalia García
Dramaturgia y dirección: Sofia Wilhelmi
FUNCIONES: VIERNES 22.30 HS. Y SÁBADOS 20 HS.
Duración: 90 minutos
EL CAMARÍN DE LAS MUSAS
Mario Bravo 960
Reservas e informes: 4862-0655
www.elcamarindelasmusas.com.ar
Entradas: $280 y $230 (estudiantes y jubilados)