Reseña realizada por Debora Longobardi
Estuvimos en el teatro ND Ateneo viendo Puto y Orquesta, espectáculo de Carlos Casella, que habla sobre el amor y la masculinidad. Cuando se abre el telón, nos encontramos con una primera imagen potente, sensual y sugerente de este multifacético artista, rodeado de la orquesta mientras comenzamos a escucharlo y escucharlos.
Un viaje musical por diversos estilos, entre temas propio y ajenos. Unas versiones sublimes donde el cuerpo, la interpretación, la voz cantada, todo es puesto al servicio de este viaje musical soñado.
Párrafo parte para cada uno de los músicos que forman parte de este espectáculo, están en el ahí y ahora con Carlos, él los busca, se les acerca, se encuentran, les canta mientras ellos tocan, y van armando escenas que da gusto ver.
En el medio de este espectáculo, aparece un nuevo cuerpo en escena, un invitado, un careo, y la danza. El Contact, el contacto de esos dos cuerpos que se van entrelazando y danzando y desplazando por el espacio, por el escenario… un momento de una belleza extrema. Imposible no viajar, a los tiempos de, por ejemplo, el grupo El Descueve. Referentes, ambos ellos, de la danza en argentina.
Hay tiempo para seguir desplegando talento y canto, para ir vistiéndose, abandonando ya esa imagen de desnudez del principio. Es que el amor… a veces, ¿es como estar desnudes? Este viaje de cuerpo, canciones, y orquesta seguramente vuelva con más funciones. A estar atentes!!!
CARLOS CASELLA: cantante y actor de las artes escénicas.
ORQUESTA:
Pedro Onetto : piano
Nicolás Rainone: contrabajo.
Tomás Carnelli : guitarra
Bemjamín Báez : violonchelo
Gustavo Lesgart: bailarín y coreógrafo
Prensa: Marcela Nuñez
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